El uso de teléfonos móviles se ha extendido a nivel mundial. Un gran debate está en curso acerca del posible perjuicio que la radiofrecuencia emitida por los teléfonos móviles puede causar en los diferentes órganos y aparatos.
Los estudios sobre animales de experimentación (ratas, ratones y conejos) muestran que la exposición a radiofrecuencias disminuye la concentración y motilidad espermáticas y aumenta el estrés oxidativo. En humanos, se han estudiado los efectos directos sobre los espermatozoides, en el laboratorio y por otro lado, se han evaluado los parámetros de calidad del esperma en los hombres que usan o no usan teléfonos móviles. Los resultados muestran que los espermatozoides humanos expuestos directamente a radiofrecuencias disminuyen su motilidad, presentan alteraciones morfométricas, y aumenta su estrés oxidativo, mientras que los hombres que usan teléfonos móviles tienen una menor concentración y movilidad espermática, menos espermatozoides con morfología normal, y menor viabilidad. Estas alteraciones parecen estar directamente relacionadas con la duración del uso del teléfono móvil.
Desde mi punto de vista, en estos estudios debería de diferenciarse claramente otro importante factor de riesgo: el estres ya que éste si afecta considerablemente a la calidad espermática. La pregunta ¿Están los hombres que usan teléfonos móviles más estresados? Seguro que si.....