El gobierno sirio ha prohibido el iPhone y probablemente también de otros smartphones.
Los móviles son una de las principales herramientas que los activistas anti-gobierno han utilizado para organizar, y para grabar las atrocidades cometidas por el régimen del presidente Bashar al-Assad.
De hecho, fue un vídeo de YouTube que mostraba el cuerpo mutilado de un niño de 13 años de edad, Hamza al-Jatib, el que impulsó las protestas contra el gobierno a principios de este año.
La prohibición de Siria se suma al actual debate en curso en los Estados Unidos y otros países sobre el uso de las tecnologías de vigilancia y el control que los Estados deben ejercer sobre su proliferación. En la otra cara de la moneda, la privacidad de los usuarios de móviles y smartphones se ve amenazada por programas capaces de espiar la localización del usuario asi como sus conversaciones y mensajes.
Las empresas que venden la tecnología necesaria para espiar a estos dispositivos o bloquear el acceso a internet también tienen parte de responsabilidad en el asunto.
Así, Blue Coat Systems, reconoció recientemente que su tecnología está siendo utilizada por el gobierno sirio para bloquear el acceso a la información en el Internet en este país. La compañía ha dicho que pensaba que el equipo iba a ser usado en Irak.
Al gobierno sirio, se suman también las prohibiciones en otros regímenes represivos como Birmania o Corea del Norte.
Los móviles son una de las principales herramientas que los activistas anti-gobierno han utilizado para organizar, y para grabar las atrocidades cometidas por el régimen del presidente Bashar al-Assad.
De hecho, fue un vídeo de YouTube que mostraba el cuerpo mutilado de un niño de 13 años de edad, Hamza al-Jatib, el que impulsó las protestas contra el gobierno a principios de este año.
La prohibición de Siria se suma al actual debate en curso en los Estados Unidos y otros países sobre el uso de las tecnologías de vigilancia y el control que los Estados deben ejercer sobre su proliferación. En la otra cara de la moneda, la privacidad de los usuarios de móviles y smartphones se ve amenazada por programas capaces de espiar la localización del usuario asi como sus conversaciones y mensajes.
Las empresas que venden la tecnología necesaria para espiar a estos dispositivos o bloquear el acceso a internet también tienen parte de responsabilidad en el asunto.
Así, Blue Coat Systems, reconoció recientemente que su tecnología está siendo utilizada por el gobierno sirio para bloquear el acceso a la información en el Internet en este país. La compañía ha dicho que pensaba que el equipo iba a ser usado en Irak.
Al gobierno sirio, se suman también las prohibiciones en otros regímenes represivos como Birmania o Corea del Norte.
